En países como Burkina Faso
no existen medios ni especialistas
para realizar cirugías cardiacas
En África subsahariana, la falta de recursos humanos, técnicos y económicos provoca que miles de personas mueran cada año por causas evitables.
Esto es lo que hacemos para cambiarlo
Tratamos en España a quienes no pueden hacerlo en su país de origen
Desde 2007 ofrecemos una vida mejor a personas enfermas que necesitan un tratamiento en España porque no puede realizarse en su país de origen. Aunque en 2021 teníamos todo preparado para recibir a nuevos pacientes, debido a la pandemia de covid-19 nos vimos obligados a seguir en standby. Pero hemos aprovechado este tiempo para evaluar e implementar mejoras, así como para contactar con las personas que han recuperado su salud en estos años de programa.
Tras escuchar las respuestas de algunos pacientes, hemos visto con ilusión cómo han cambiado sus vidas en este tiempo después de sus operaciones en España. Muchos de ellos han formado una familia y ahora tienen hijos. Otros, incluso, han apostado por una vida profesional que contribuya a la salud de su país. Nos unimos a su esperanza de que, gracias a ellos, aquellos que lo necesiten en un futuro, puedan recuperar su salud sin tener que hacerlo lejos de las personas que más quieren.
EN ESTOS 15 AÑOS
BENEFICIARIOS
Cuatro historias de vida
Personas que han recuperado su salud en España en estos 15 años
Bénedicte
Operada con 16 meses
«Damos gracias porque todo va estupendamente, Benedicte se encuentra muy bien. La operación de intestino fue complicada, pero ahora va a la escuela; está floreciendo y es muy trabajadora. Es una bendición para toda la familia. Tenemos muy buenos recuerdos, gracias por todo.»
Dos generaciones recuperadas
Bénedicte es la protagonista de esta historia con final feliz. Siendo un bebé de apenas 16 meses, Bénedicte necesitaba cuidados urgentes para salvar su vida. La pequeña padecía de la enfermedad de Hirschprung, lo cual causaba que la zona del colon careciera de los nervios que favorecen movimientos peristálticos, causando una severa obstrucción.
En Fundación Recover ya conocíamos a su padre, Mamadou Karambiri, un antiguo paciente cardiópata que se operó en España a través de nuestro programa, así que no dudamos en traer a la pequeña para tratarse en España. En abril de 2012 viajó con su madre a Madrid, operándose en la Fundación Jiménez Díaz bajo el mando de la Dra. Gloria Pérez Tejerizo y el Dr. Pablo Aguado Roncero. Ahora, 10 años después, recibimos con ilusión el mensaje de su madre, que nos cuenta cómo Bénedicte se está convirtiendo en una joven trabajadora. ¡Le deseamos lo mejor!
Philomene
Operada con 18 años
Quiero agradecer a Recover el impulso que me ha dado. Al ser diagnosticada con una cardiopatía congénita, no dudaron en asumir mi costosa operación, sin la cual no estaría hoy aquí. Estoy orgullosa de lo que he llegado a ser: una estudiante de medicina de cuarto año. ¡Gracias!
Comprometida con la salud de su país
Durante una campaña cardiológica en Burkina Faso en 2017 conocimos a Philomène, una joven estudiante de 18 años que requería una intervención quirúrgica para poder implantarle una válvula en el corazón. Philomène padecía de estenosis subaórtica e insuficiencia aórtica, por lo que hicimos posible que viniera a España para recibir los cuidados necesarios a cargo del Dr. Gonzalo Aldámiz-Echevarría y su equipo en el hospital Quirónsalud de Albacete.
Siete semanas después, tras su recuperación, pudo volver a Burkina Faso y continuar su vida de estudiante. Nos alegra recibir sus bonitas palabras y saber que, tras su vuelta, comenzó a estudiar Medicina y ahora, cuatro años después, está a punto de terminar sus estudios y contribuir al desarrollo sanitario de su país. ¡Gracias por tu compromiso!
Michel
Operado con 33 años
La operación a la que me sometí me permitió gozar de buena salud y mi familia fue bendecida con la llegada de nuestro recién nacido en noviembre, tras 12 años de matrimonio. No habría sido posible si no hubiese tenido el apoyo de Fundación Recover: ¡gracias por darme esta oportunidad!
La historia de un corazón
Durante una campaña cardiológica en Burkina Faso conocimos a Michel, un joven de 33 años que necesitaba una cirugía de corazón, de la válvula mitral aórtica. Esta operación no se podía realizar en su país por falta de especialistas y equipamiento médico y, por ello, en abril de 2016 viajó a España para recibir la atención médica necesaria a través de nuestro Programa de Pacientes. El Dr. Gonzalo Aldámiz-Echevarría y su equipo le operaron en el Hospital Quirónsalud de Albacete y, siete semanas después, pudo regresar a casa.
Ahora, seis años después, nos emociona saber que acaban de dar la bienvenida a un nuevo miembro de la familia. Gracias a la operación, Michel no solo ha recuperado su salud y ha podido continuar su trabajo como dinamizador de proyectos de una ONG en el país africano, sino que también ha podido disfrutar de su nueva vida. ¡Enhorabuena!
Sibi
Operado con 33 años
Antes de la intervención estaba limitado, pero ahora, tras la operación que necesitaba, he podido formar una familia. Además, he estudiado y en este tiempo me he convertido en enfermero, ayudando a otras personas que lo necesitan: ¡gracias por todo vuestro apoyo, no lo olvidaré!
Recuperar una vida para salvar otras
En 2008 conocimos a Sibi, un joven de 34 años de Burkina Faso que tenía una insuficiencia aórtica severa-masiva y necesitaba una intervención quirúrgica. En agosto de ese mismo año Sibi llegó a España a través de nuestro Programa de Pacientes e ingresó en la antigua Clínica Capio Recoletas de Albacete. La intervención, a cargo del Dr. Gonzalo Aldámiz-Echevarría y su equipo, fue un éxito y pudo regresar a su país.
En Fundación Recover seguimos muy unidos a Sibi, pues desde entonces no solo se ha convertido en enfermero y ayuda a quienes lo necesitan en Burkina Faso, sino que, además, es la persona que nos apoya con nuevos casos de pacientes burkineses que necesitan ser operados en España, acompañándoles y guiándoles en el duro proceso de gestionar el visado o preparar un viaje a un país desconocido para recuperar la salud. ¡Gracias por tanto, Sibi!